El primero de enero fuimos al Pont-Neuf a tomar el barquito que recorre el Sena. Es simpático que el puente más antiguo que se conserva se llame, justamente, "puente nuevo". Empezó a construirse en 1578 y se terminó con Enrique IV, en 1607.
Acá el sol cae a las 5 de la tarde, así que, como salimos más o menos a esa hora, hicimos el recorrido de noche. París tiene una iluminación alucinante (no por nada la llaman "la ciudad de las luces"; al igual que en los demás temas, está bien ganada la fama), y estar en el Sena, con la luna llena y la ciudad iluminada, valió el frío de morirse que pasamos. Justo estábamos en el barco cuando dieron las 7, y teníamos la torre Eiffel a la vista. La torre Eiffel tiene 3 colores. De día se la puede ver como uno la tiene en mente: color metal oscuro y opaco. Cuando cae la noche, se ilumina y parece dorada. A las horas en punto tiene otra iluminación, de luces blancas titilantes, que la hacen ver como de cristal, y así es como estaba en el momento de subir al barco.
Acá el sol cae a las 5 de la tarde, así que, como salimos más o menos a esa hora, hicimos el recorrido de noche. París tiene una iluminación alucinante (no por nada la llaman "la ciudad de las luces"; al igual que en los demás temas, está bien ganada la fama), y estar en el Sena, con la luna llena y la ciudad iluminada, valió el frío de morirse que pasamos. Justo estábamos en el barco cuando dieron las 7, y teníamos la torre Eiffel a la vista. La torre Eiffel tiene 3 colores. De día se la puede ver como uno la tiene en mente: color metal oscuro y opaco. Cuando cae la noche, se ilumina y parece dorada. A las horas en punto tiene otra iluminación, de luces blancas titilantes, que la hacen ver como de cristal, y así es como estaba en el momento de subir al barco.
De día desde la pista de patinaje frente al Trocadero.
Dorada.
De cristal, a las 7 en punto. En realidad, no logramos captar con la cámara el efecto que produce en vivo. Que conste que lo intentamos; hasta hicimos una peregrinación desde los jardines de Luxemburgo para filmarla (en el medio nos vimos obligadas a hacer una parada para tomar un vino caliente y comer una crêpe sucre; viajar implica ciertos sacrificios, se sabe).
Desde el barco vimos una estatua que usan como referencia para medir la crecida del río, que en la inundación de 1910 quedó cubierta hasta el cuello. También se veía la antorcha gigante, copia de la antorcha de la estatua de la libertad que se construyó como muestra de la amistad entre EEUU y Francia, y donde se mató Lady D. Otras curiosidades que descubrimos desde el barquito fueron: la casa -supuestamente- más chica de París (de dos ventanas, una sobre la otra), la casa más antigua -insisto, supuestamente-, y el lugar donde los reyes comieron por primera vez con tenedor. En verdad, al lugar ya nos lo había presentado Michi: el antiguo restaurante La Tour d'Argent, pero ignorábamos el dato del tenedor. Michi dice que el tenedor es un invento florentino, y que antes comían con cuchara y con las manos.
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